Las empresas tienen grandes posibilidades de éxito y crecimiento económico al implementar la perspectiva e igualdad de género en su ambiente laboral ¡Aquí te decimos por qué!
La igualdad de género en el ámbito laboral debería de ser -a estas alturas- un tema transversal y prioritario en cualquier empresa en México y el mundo; sin embargo, aún no es así. Las oportunidades son desiguales y persiste la brecha de género, en donde millones de mujeres viven en pobreza, violencia y discriminación.
“Cuando mujeres y hombres cuentan con igualdad de oportunidades y derechos, el crecimiento económico y el desarrollo social se aceleran. Las empresas y países que incluyen y empoderan a sus mujeres tienen un desempeño más favorable que aquellos que no lo hacen”, Koldo Echebarría, Director General de ESADE en el informe Género y Finanzas.
Igualdad de género en América Latina
Las empresas en América Latina y el Caribe -según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)– no establecen como estrategia prioritaria la igualdad de género, pues sólo el 21% cuentan con una política al respecto. Por ello, existe una brecha salarial significativa entre hombres y mujeres, baja presencia de mujeres en cargos gerenciales o directivos, violencia y acoso sexual, estereotipos y roles de género, entre otras barreras para alcanzar una verdadera igualdad.
Por otra parte, esta región de América necesita 74 años para alcanzar la paridad -estimado del estudio sobre la brecha de género del Foro Económico Mundial (WEF)- es decir, que debemos sumar esfuerzos para cambiar la situación de las mujeres en el ámbito laboral y las empresas son un campo de grandes posibilidades, que tendrían ventajas si incorporan en sus prácticas la perspectiva de género.
“La mujer en general está infrautilizada como talento, como empleada en las empresas y también como clienta. No se está viendo todavía el potencial ni la oportunidad, salvo excepciones […] saber que avanzar en equidad de género es una oportunidad para los países, para las mujeres y para ellos” Gema Sacristán, Directora General de negocios de BidInvest en América Latina.
Igualdad de género en tu empresa
Pero ¿qué es la perspectiva de género y por qué es importante?, una definición práctica sería la que proporciona la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim):
“De acuerdo con la Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres, la perspectiva de género se refiere a la metodología y los mecanismos que permiten identificar, cuestionar y valorar la discriminación, desigualdad y exclusión de las mujeres, que se pretende justificar con base en las diferencias biológicas entre mujeres y hombres, así como las acciones que deben emprenderse para actuar sobre los factores de género y crear las condiciones de cambio que permitan avanzar en la construcción de la igualdad de género.”
Y ¿por qué es necesario implementarla en tu empresa? La respuesta es amplia pero concreta, esta perspectiva mejora la vida de todas las personas, sociedades y los países. Además, se rompe con los estereotipos de género, hay una mejor socialización, hay mayores oportunidades de desarrollo y crecimiento económico, tanto para empresas y negocios, como para los mismos gobiernos.
“La importancia de la aplicación de la perspectiva de género radica en las posibilidades que ofrece para comprender cómo se produce la discriminación de las mujeres y las vías para transformarla,” Conavim.
Qué hacer para comprometerte con la igualdad de género
En España se hizo el Informe “Indicadores de igualdad para las empresas: Propuesta de indicadores para la elaboración de planes de igualdad (2010)”, por la Generalitat de Catalunya; el cual propone 10 puntos -que puedes usar de referencia- para analizar si una empresa está comprometida con la igualdad de género:
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- Adopción por parte de la empresa de una gestión organizativa que tiene en cuenta la igualdad de oportunidades.
- Participación e implicación del personal de la empresa en el desarrollo de acciones en favor de la igualdad de oportunidades.
- Uso no discriminatorio en el lenguaje y la comunicación corporativa.
- Participación igualitaria de mujeres y hombres en los puestos de trabajo de la empresa.
- Presencia de mujeres en cargos directivos o de responsabilidad.
- Medidas implantadas para mejorar la compatibilidad de la vida personal y laboral.
- Adopción de medidas de prevención de salud y riesgos laborales con perspectiva de género.
- Igualdad retributiva entre mujeres y hombres.
- Condiciones laborales igualitarias para mujeres y hombres.
- Promoción de medidas de gestión de la movilidad que permitan un acceso igualitario de las mujeres y los hombres en el puesto de trabajo.
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En México, el Consejo Nacional para Prevenir y Eliminar la Discriminación (Conapred), la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) promueven la Norma Mexicana NMX-R-025-SCFI-2015 en Igualdad Laboral y No Discriminación, que implica una certificación que consta de 6 pasos. Si quieres saber más al respecto da clic aquí.
Ahora que ya conoces del tema ¿qué esperas?, como mujer empresaria es un deber y una responsabilidad implementar esta perspectiva de género de forma prioritaria en tu ambiente laboral, para lograr así una igualdad de género; de esta forma, estaremos contribuyendo al empoderamiento y a detonar el potencial de las mujeres en la empresa, lo cual traerá grandes beneficios al entorno laboral.
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